· Declaración de los departamentos de Justicia en la sede del IVAC en Donostia-San Sebastián
· “Hacer justicia hoy pasa por prestar atención a las necesidades de las víctimas y al objetivo de la reinserción de los responsables del delito”
· País Vasco, Catalunya y Navarra insisten en el compromiso de “transitar de una justicia excesivamente retributiva y punitiva hacia un modelo de gestión de los conflictos más restaurativo, humanista y democrático”
País Vasco, Catalunya y Navarra se han definido esta tarde “como Territorios que acumulan experiencia y tradición en el ámbito de la Justicia Restaurativa y pioneros en la implantación de políticas públicas respaldadas por los estándares internacionales en la materia”, en especial por la Recomendación del Consejo de Europa y la Declaración de Venecia suscrita por el Consejo de Europa. “Hacer justicia hoy pasa por prestar atención a las necesidades de las víctimas y al objetivo de la reinserción de los responsables del delito” han destacado.
Junto a la directora de IVAC-Instituto Vasco de Criminología Gemma Varona, impulsora del encuentro y Aitor Zurimendi, secretario general de la UPV/EHU, la Consejera de Interior, Función Pública y Justicia y portavoz del Gobierno de Navarra-Nafarroa, Amparo López Antelo; la Consellera de Justícia, Drets i Memòria de Catalunya, Gemma Ubasart; y la Consejera de Igualdad, Justicia y Políticas Sociales de Euskadi, Nerea Melgosa han suscrito esta tarde, en el campus donostiarra de la EHU-UPV de Ibaeta, una declaración que se basa en el principio de que “la justicia restaurativa supone un nuevo enfoque en la justicia penal, pero también en otros ámbitos donde se pueden producir daños o conflictos”.
El acto ha contado con la presencia de Ivo Aertsen, profesor emérito de la Universidad de Lovaina, Bélgica, quien más tarde ha sido nombrado Miembro de Honor del IVAC-KREI, y ha ofrecido la lección inaugural del Curso 2023/24 del IVAC titulado “Otro encuentro sin fronteras entre la Universidad y las políticas públicas sobre la aplicación y desarrollo de la justicia restaurativa, en particular a victimizaciones graves Víctimas y sistemas de justicia penal: expectativas y realidad”.
Nuevo enfoque
“La justicia restaurativa supone un nuevo enfoque en la justicia penal, pero también en otros ámbitos donde se pueden producir daños o conflictos. Se trata de un enfoque más democrático y social, mediante el cual se devuelve el papel protagonista a las personas implicadas, incluyendo la sociedad en su conjunto, sin perjuicio del carácter garante de los/as operadores/as jurídicos/as” indica la declaración suscrita por las tres Consejeras y la directora del IVAC.
En el documento acordado por las tres administraciones de justicia se recalca que “la justicia restaurativa es una justicia más cercana a la vida de las personas y las capacita para participar activamente en el tratamiento del injusto. El efecto reparador en la víctima es de un alto valor personal pero además tiene un impacto positivo en el conjunto de la sociedad. Un efecto que no se da en el procedimiento penal ordinario en el que las partes enfrentadas tienen poco margen para abrir un proceso de reparación y, en cambio, predomina el conflicto y sus efectos negativos”.
“La judicialización del conflicto sitúa a las partes en un escenario de confrontación y, en términos generales, la sentencia judicial no tiene un efecto positivo en el trauma de la víctima ni reconduce el comportamiento errático del victimario. Sabemos que las expectativas de las partes y del conjunto de la sociedad no quedan, en general, satisfechas” indica el texto apoyado por Melgosa, Lopez, Ubasart e impulsado por Varona.
“La participación de la ciudadanía en la justicia debe facilitarse y potenciarse propiciando respuestas restaurativas que permitan articular los principios de voluntariedad, solidaridad, reparación, responsabilización y pacificación, sin perder un enfoque interdependiente en relación con los derechos humanos de las víctimas y de las personas investigadas o condenadas” destaca el acuerdo.
Reinserción
De acuerdo con este espíritu, las tres administraciones han declarado que “hacer justicia hoy pasa por prestar atención a las necesidades de las víctimas y al objetivo de la reinserción de los responsables del delito”. País Vasco, Catalunya y Navarra insisten en el compromiso de transitar de una justicia excesivamente retributiva y punitiva hacia un modelo de gestión de los conflictos más restaurativo, humanista y democrático.
Por todo ello han acordado “Trabajar para cultivar los valores y principios de la justicia restaurativa para generar un cambio cultural y sistémico en el ámbito judicial y, por extensión, en el conjunto de la sociedad” e “Implantar políticas públicas efectivas que potencien los medios de los que las tres administraciones disponen al servicio de la Justicia Restaurativa en el ámbito penal, así como en otros ámbitos, generando un cambio cultural y sistémico dentro del marco más amplio de políticas de convivencia y justicia”.
También se han comprometido a “potenciar servicios estables, con formación y calidad, apoyados por las administraciones públicas, con financiación suficiente, supervisión y evaluación continua de resultados; Impulsar el fomento de la prevención de la judicialización de los conflictos a través de las prácticas restaurativas comunitarias, definidas como herramientas de prevención y resolución de conflictos no judicializados, así como por la promoción de la cohesión social, buscando generar condiciones colectivas de confianza, respeto y cuidado, y potenciando una convivencia pacífica de nuestras comunidades”.
“De esta forma entendemos que la Justicia Restaurativa contribuirá de una forma decisiva al desarrollo de sociedades más cohesionadas, justas y pacíficas, como objetivo último de toda política pública democrática” concluye la declaración suscrita por las consejeras de Justicia del País Vasco, Navarra y Catalunya en Donostia-San Sebastián.
